Mis estudios de mercado
He tenido ocasión de realizar distintos estudios de mercado por sectores en los que he trabajado:
- Estudio de mercado de vino envasado en vidrio en Andalucía
- Estudio de mercado de empresas envasadoras de conservas, mayonesas y salsas, encurtidos y yogures (también en Andalucía)
- Estudio de mercado de fitosanitarios en Argelia
- Estudio de mercado de fitosanitarios en Marruecos
- Estudio de mercado de fitosanitarios en 9 países del Sahel
- Estudio de mercado de fitosanitarios en Egipto
Todos ellos han sido posibles gracias a una carrera de fondo que consiste en la incesable búsqueda de recursos ( email, internet, teléfono, contactos, visitas de prospección, directorios, embajadas, cámaras de comercio y un largo etc.), paciencia y perseverancia.
Realizar estudios de mercado requiere de nuestra faceta de investigadores de recursos. Hoy en día, gracias a las nuevas tecnologías (internet, skype, redes sociales, etc.), dicha tarea es algo más fácil que cuando sólo contábamos con el teléfono y prospección a golpe de viajes.
Pero según cuál sea el estudio de mercado que se lleve a cabo, el cometido puede antojarse cuanto menos complicado.
Prospectar mercados en España y Europa es cuestión de ponerse, recabar la información (suele ser accesible) y propectar mediante visitas. No supone un gran misterio; es cuestión de constancia e ir completando el puzzle.
Prospectar el mercado en países árabes es otra cosa…Muchos empresarios han apostado por explorar el mercado en países africanos y del Oriente Medio por la gran oportunidad que supone ampliar las fronteras del negocio en estos países.
Por este motivo me encomendaron hace un par de años llevar a cabo estudios de mercado y análisis de precios en distintos países africanos y del oriente medio.
Pondré como ejemplo Argelia, país en el que realicé un estudio del mercado de importadores/distribuidores de productos fitosanitarios (pesticidas).
Allí, el acceso a la información es limitado por parte de los Ministerios y fuentes de información estatal, nuestra cámara de comercio en Argel no dispone, desafortunadamente, de información segmentada más allá de los datos más básicos, y con suerte, nuestro interlocutor hablará francés.
Todo ello hace que, una vez agotados todos los recursos de investigación a nuestro alcance, se haga imprescindible una visita a las ferias del sector en el país, donde no están todos los que son, pero que será sin duda una buena excusa para concertar citas con aquellas empresas aún no contactadas o con aquellas que puedan ser de interés. (SIPSA Agro por ejemplo, es una feria del sector agrícola a tener en cuenta).
En el Sahel la situación es distinta. Allí la disposición de colaboración tanto de organismos públicos como empresas privadas es excepcional. El problema recae en localizar datos de importaciones certeros, ya que no existen datos estadísticos centralizados, ni a nivel de Ministerios ni a nivel aduanero. En muchos de estos países los fitosanitarios entran principalmente vía licitaciones públicas del Estado (Níger, Mauritania, Chad ), mediante compra directa de los ingredientes activos para que empresas estatales formuladoras formulen directamente en el país (Senegal), ó bien mediante importaciones directamente por grandes empresas multinacionales con sede propia en el país (Burquina Faso, Mali).
Realizar estudios de mercado en Egipto es con mucho aún más complejo que en los dos casos anteriores. El principal motivo es que los Ministerios vetan cualquier acceso directo de información a empresas extranjeras ( según ellos, para fomentar el empleo en su propio país), de modo que cualquier acceso a la información debe realizarse mediante «Local Agents», o bien aún para más aventureros, establecer una «Representation office» en el país con objeto de realizar exclusivamente prospecciones de mercado in situ.
No obstante, me enorgullezco de haber completado con éxito todos los estudios de mercado anteriormente mencionados y haber facilitado el desarrollo de negocios de empresas del sector Agronómico.